31 de diciembre, 2017

El PJ bonaerense repudió la prisión domiciliaria de Etchecolatz

El partido manifestó su "preocupación" por el beneficio al represor de 88 años, que tiene múltiples condenas por delitos de lesa humanidad.

El Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires manifestó su «profundo pesar» y «preocupación» por la libertad vigilada que la Justicia le otorgó a Miguel Etchecolatz.

 

 

«Este nefasto asesino tuvo 6 condenas perpetuas y 2 juicios pendientes de lesa humanidad, las cuales son muestras inequívocas de la ferocidad de dicho delincuente», indicó el PJ bonaerense en un comunicado.

 

 

Sin embargo, el escrito señala que «a pesar de la tristeza que nos causa el beneficio procesal otorgado al represor Etchecolatz, nos recompensa el alma y nos llena de alegría el corazón, la recuperación del nieto número 127».

 

 

El represor se encuentra en su casa en el Bosque Peralta Ramos, en la ciudad de Mar del Plata, luego de que se concretara su traslado desde el penal de Ezeiza tras la decisión de la Justicia de concederle el beneficio de la prisión domiciliaria.

 

 

El traslado del detenido represor, de 88 años, con múltiples condenas por delitos de lesa humanidad, se concretó durante la madrugada. Poco después, efectivos de la Prefectura Naval Argentina se hicieron presentes en la vivienda.

 

 

No obstante, luego se retiraron del lugar y, en torno al predio en el que se encuentra la vivienda, con un muro perimetral, no quedó visible ningún dispositivo de seguridad ni la presencia de efectivos de ninguna fuerza.

 

 

El lugar donde el represor, quien fuera mano derecha de Ramón Camps, jefe de la Policía bonaerense durante la última dictadura militar, cumple con el beneficio de la prisión domiciliaria, está rodeado por un paredón con dos portones verdes y ubicado en un marco de una frondosa arboleda que apenas permite ver el techo de la vivienda.

 

 

Miembros de distintas agrupaciones marcharon por las calles céntricas de Mar del Plata pidiendo que Etchecolatz «vaya a una cárcel para cumplir su condena».