Una familia compuesta por dos mayores y dos niños de 6 y 8 años necesitó en noviembre contar con ingresos por $ 13.126,29 para poder adquirir la canasta básica total(CBT), es decir, para no caer por debajo de la línea de pobreza.
Ese mismo núcleo familiar requirió de $ 5.446,59 para comprar la CBT, y no ingresar en la zona de indigencia.
Desde abril, cuando se reanudó la medición de estos indicados, la CBA acumuló un aumento del 16,3%, mientras que la CBT avanzó el 15,9%.
El Indec reanudó este año la medición de los índices de pobreza e indigencia, que habían dejado de confeccionarse en el 2013.
A mediados de este año, el 32,2 % de los habitantes del país eran pobres, y entre ellos, el 6,3% era indigente.