11 de julio, 2018

Mauricio Macri cenó con la cúpula de la UCR en Olivos

La comitiva radical estuvo compuesta por Ernesto Sanz, Alfredo Cornejo, Gerardo Morales, Gustavo Valdés, Ángel Rozas y Mario Negri.

La cúpula de la UCR visitó este martes en la Casa Rosada al jefe de Gabinete, Marcos Peña, y los ministros del Interior, Rogelio Frigerio, y de Hacienda, Nicolás Dujovne, para analizar la situación de cara a la redacción del Presupuesto y el déficit fiscal.

 

La comitiva radical estuvo compuesta por el exjefe partidario Ernesto Sanz; los gobernadores de Mendoza, Alfredo Cornejo; de Jujuy, Gerardo Morales; y de Corrientes, Gustavo Valdés; así como el titular del bloque radical en el Senado, Ángel Rozas; y el coordinador del interbloque de Cambiemos en la Cámara baja, Mario Negri.

 

 

Para cerrar el día, el grupo cenó con el presidente Mauricio Macri en Olivos para dar un mensaje de unión, luego de los cruces de los dirigentes con Elisa Carrió.

 

 

A pesar que los líderes radicales tuvieron un tenso intercambio de acusaciones con la líder la Coalición Cívica, durante el encuentro no hablaron sobre las internas y roces dentro de Cambiemos.

 

La diputada reavivó el fuego durante un foro con empresarios en Entre Ríos, en donde se refirió al futuro del oficialismo y, fiel a su estilo, lanzó declaraciones polémicas. «Si yo tuviera interés, haría una interna, pero no tengo. En consecuencia, la alianza está asegurada y los radicales van a hacer lo que nosotros digamos», aseguró.

 

 

Al principio de la reunión en la Rosada, por parte del Ejecutivo encabezaron la charla Peña y Frigerio, aunque más tarde se sumó el titular de Hacienda, quien llegó a Balcarce 50 con varios documentos bajo el brazo.

 

 

«Venimos a escuchar», se limitaron a señalar desde la UCR, en alusión a que oyeron las explicaciones de Dujovne sobre de la elaboración del Presupuesto 2019.

 

 

Pero la jornada no terminó allí. Después de estar reunidos por más de dos horas en el primer piso de la Casa Rosada, el grupo se trasladó hasta la Quinta de Olivos, en donde los estaba esperando como anfitrión de una cena el Presidente.

 

 

La invitación sirvió como un gesto de distensión después de la seguidilla de cruces entre las figuras de Cambiemos, especialmente por las declaraciones de Carrió, que nuevamente dejaron al descubierto el malestar que se vive dentro de la alianza.