El Presidente se expresó así luego de que este jueves la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal dispuso la reapertura de la causa por la denuncia que presentó el fiscal fallecido Nisman contra la expresidente Cristina de Kirchner y otros funcionarios.
El tribunal dispuso además apartar de la investigación al juez federal de primera instancia Daniel Rafecas y a los camaristas federales Eduardo Freiler y Jorge Ballesteros. Los jueces Ana María Figueroa, Mariano Borinsky y Gustavo Hornos hicieron lugar al recurso de Casación de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), la tuvieron por parte querellante y revocaron la resolución de la Sala I de la Cámara Federal para que se sustancie la investigación.
Además, apartaron «a los jueces federales intervinientes por haberse expedido sobre el fondo del asunto y en garantía de imparcialidad«, en alusión a Rafecas, Freiler y Ballesteros, quienes habían desestimado la apertura de una investigación en dos oportunidades, informó el Centro de Información Judicial (CIJ).
Macri elogió a los jueces Borinsky y Hornos por resolver que la investigación continúe, pero no opinó lo mismo sobre Ana María Figueroa, pese a que votó de igual manera que sus colegas. «Han tenido muchísima presión de la compañera de sala (Figueroa) y de otros jueces de Casación y especialmente de Justicia Legítima para que esto no suceda», sostuvo.
«Todo lo que contribuya a que lleguemos a la verdad en todos los aspectos que nos ha pasado, nos pasa, y nos pasará es fundamental», sostuvo el Jefe de Estado.