29 de noviembre, 2016

Las hipótesis sobre la caída del avión que trasladaba a Chapecoense

Mientras continúan los operativos de remoción de los restos del avión, que se prolongarán varios días, comenzaron a esbozarse las primeras teorías que explicarían por qué se estrelló el avión que trasladaba al plantel de Chapecoense de Brasil: una combinación entre la falta de combustible y un desperfecto eléctrico.

 

El titular de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres colombiano, Carlos Iván Márquez Pérez confirmó que el avión transportaba a 77 personas, y no 81 como se conoció inicialmente, dado que a último momento, cuatro personas que figuraban en la lista de embarque no abordaron. De esta manera, anunciaron que concluyó la operación de búsqueda y rescate, con un saldo de seis heridos de gravedad.

 

avion-chapecoense-3Según el último parte médico, el lateral brasileño Alan Ruschel sufrió una compresión en la tibia, otra abdominal y fractura en la 10° vértebra. Debió ser intervenido quirúrgicamente y aunque está estable, corre riesgo de quedar parapléjico. Helio Neto, según indicaron, ingresó en estado muy grave, con un traumatismo cerebral y fracturas abiertas en las extremidades. Fue operado pero su estado es reservado.

 

¿Pero qué fue lo que realmente sucedió? Una combinación entre la falta de combustible y un desperfecto eléctrico aparecen como los principales motivos que desencadenaron el trágico accidente.

 

El vuelo tenía previsto aterrizar en Medellín a las 3:33 de la mañana colombiana, pero a 50 kilómetros del aeropuerto la torre de control perdió contacto con la aeronave Avro Regional Jet 85, perteneciente a la aerolínea Lamia Corporation de Bolivia, con matrícula CP2933.

 

avion-chapecoense-caja-negra-5Por entonces el avión volaba a más de 4 mil metros de altura por el Cerro Gordo, en el Municipio de La Ceja, Antioquia, sitio en el que se encontraron los restos y la caja negra, la cual analizarán «lo antes posible», según informó el ministro de Transporte de Colombia, Jorge Eduardo Rojas. Sin embargo, los informes definitivos podrían demorar hasta un año y medio.

 

El piloto habría comunicado a la torre de control de Aeropuerto Internacional José María Córdova de Rionegro un falla en los circuitos eléctricos, por lo que decidió evacuar todo el combustible para evitar un incendio ante un posible aterrizaje forzoso, según informó el diario español El Mundo.

 

Mientras hacían frente a los problemas técnicos de la nave, la tripulación pidió prioridad para aterrizar y recibió el visto bueno por parte de los operadores del aeropuerto. En ese mismo momento otra aeronave proveniente de Panamá de la compañía colombiana Viva Colombia, que se encarga de los vuelos de bajo costo, lanzó una alerta de emergencia para descender ante una pérdida de combustible, según especificó Caracol Radio.

 

avion-chapecoense-2El alerta de una emergencia tiene un nivel de importancia mayor que el lanzado por el de la compañía boliviana, por lo que la torre de control le habría concedido la prioridad al otro vuelo, pidiéndole a la aeronave que trasladaba al Chapecoense que realice algunos giros para hacer tiempo y así conseguir el permiso para aterrizar.

 

Once minutos después del llamado a la torre de control, se perdió la comunicación. Había dado dos vueltas en círculo al Valle de San Nicolás. La nave se precipitó en ese momento y provocó la tragedia por razones que buscan esclarecer los encargados de la investigación, que recibirán colaboración de especialistas de Gran Bretaña.

 

El ministro de Turismo advirtió que la torre de control actuó de manera correcta y la principal hipótesis ante eso quedó centrada en una falla en el cálculo que realizó el piloto del avión sobre la autonomía de la nave.

 

Según el sitio web Flytracker, la nave tenía combustible para recorrer 2.965 kilómetros y alcanzó a transitar una distancia de 2.975 kilómetros, excediéndose por 10 kilómetros en el cálculo inicial. Aunque todavía no logran esclarecer si el desperfecto eléctrico fue ocasionado por esa insuficiencia o si este problema fue el que obligó a transitar más kilómetros, dejando desprovisto al vuelo de Lamia.

 

Por su parte, Ricardo Albacete, fundador de Lamia y dueño del avión siniestrado, sostuvo que la tragedia pudo haberse desatado por una «tormenta eléctrica» que hizo que un rayo cayera sobre el aparato y «apagara» su sistema eléctrico. «No se sabe si lo agarró un rayo y lo apagó», advirtió al sitio español El Confidencial.