Empresarios y sindicalistas conforman una mesa de diálogo permanente

El sindicalismo colmó el Coloquio de Idea y en una actitud activa no dejaron de participar en las conferencias, en donde conversaron animadamente con el sector empresarial. Estos encuentros casuales, sin embargo, también dieron lugar a reuniones más formales y con un propósito concreto: construir un ámbito para discutir temas de fondo del país entre sindicalistas y empresarios.

La conversación se dio este jueves por la mañana en el restaurante del primer piso del Sheraton entre Cristiano Rattazzi, Guillermo Stanley, Horacio Martínez, Oscar Andreani y los gremialistas Andrés Rodríguez, Juan Carlos Schmid y Julio Piumato.

«La idea es tener un foro donde debatir temas tales como la inflación, la economía informal, la pobreza, sería algo parecido al Dialogo Social», explicó a este medio Andrés Rodríguez, de UPCN.

Rodríguez, Schmid y Piumato les comentaron la intención empresaria a Gerardo Martínez, de la UOCRA, a José Luis Lingeri, de Aysa, y Antonio Caló, de la UOM, quienes fueron invitados a sumarse a otro encuentro con empresarios en el marco del Coloquio. En principio, los sindicalistas ven con buenos ojos la iniciativa aunque aún está «en pañales».  

Uno de los problemas que conversaron fue la dificultad que tiene el sector empresario en tener una representación lo más amplia posible en pocas voces. «Son muchos dirigentes y sectores», habría dicho Cristiano Rattazzi. Los empresarios quedaron en trabajar para encontrar la entidad o los representantes que puedan ser los interlocutores ante la dirigencia gremial. Por el lado sindical es más fácil ya que están aglutinados en la CGT. Como reconocieron los empresarios, lo que aún falta es la entidad «contraparte» acotaban los gremialistas.

La intención de este llamado a una mesa de dialogo empresaria-sindical es para discutir más allá de los aspectos laborales. «Se apunta a debatir temas que trascienden los intereses sectoriales», explicaron los gremialistas.

La convocatoria empresaria a mantener un diálogo más fluido con el sindicalismo -independientemente de la relación que mantienen sectorialmente- recién comienza pero no deja de ser una muestra de que realmente los hombres de negocios de la Argentina parecen estar decididos a involucrarse en temas que van más allá de sus intereses.

Todo se da en sintonía con el pedido que hizo la gobernadora María Eugenia Vidal «que salgan de su zona de confort», ratificado por el jefe de Gabinete Marcos Peña cuando dijo: «Los que más tienen deben mirar el problema de la pobreza».