19 de julio, 2018

El juez ordenó la prisión preventiva para «Pity» Álvarez

Martían Yadarola consideró que el músico "presentaba la capacidad psíquica suficiente como para comprender lo que hizo" y su consecuente pena.

La Justicia procesó con prisión preventiva al músico Cristian «Pity» Álvarez por el crimen de Cristian Díaz, el hombre al que asesinó de cuatro disparos tras una discusión en el barrio Samoré, en la zona porteña de Villa Lugano.

 

 

Cabe consignar que Álvarez fue procesado por «homicidio calificado por el uso de arma de fuego», según indicaron fuentes judiciales.

 

 

Testigos y distintos elementos secuestrados apuntan que el pasado 12 de julio a la madrugada el líder de «Viejas Locas», tras matar a la víctima, descartó el arma, una pistola Lorcin 6.35, en una alcantarilla, para luego escapar en su auto, junto a su novia.

 

 

El juez Martín Yadarola, además del procesamiento para el cual tenía plazo de dictaminarlo hasta el 27 de julio, ordenó que el músico, que se encuentra internado en el pabellón psiquiátrico de la Unidad Penal de Ezeiza, reciba atención por su adicción a las drogas.

 

 

El arma encontrada en la alcantarilla presentó varias huellas dactilares, aunque ninguna lo suficientemente completa como para obtener una identificación positiva.

 

Sin embargo, tanto la novia del músico, llamada Agustina, como varios testigos señalaron que fue «Pity» quien disparó el arma homicida y luego la descartó en una alcantarilla, algo que coincide con otros testimonios que llamaron al 911 para reportar el caso.

 

 

La pistola tiene su número de serie intacto, pero una búsqueda en la base de datos de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC) dio un resultado negativo, ya que no tiene ningún titular registrado, algo llamativo. Además, cuando se envió la misma consulta al Registro Provincial de Armas (RePAr), la respuesta fue la misma: no está registrada ni tiene pedido de secuestro.

 

 

Ahora, el juez espera los resultados de las pericias hechas por la División Homicidios de la Policía de la Ciudad. Se incluyen los análisis de la Unidad Criminalística en el lugar del hecho con una reconstrucción del crimen, el test toxicológico al cuerpo de la víctima -en sus bolsillos no hallaron drogas- y los exámenes a la sangre extraída a Álvarez con el mismo objetivo de detectar trazos de alcohol o drogas tras entregarse.

 

 

«Pity» permanece apresado en el Programa Integral de Salud Mental Argentino (PRISMA) que funciona en el complejo carcelario de Ezeiza, dependiente del Servicio Penitenciario Federal (SPF).