1 de febrero, 2024

El Gobierno invitó a un grupo de grandes empresarios al Vaticano antes de la reunión de Milei con el Papa Francisco

Los hombres de negocios tendrán agenda en Roma junto a la canciller Diana Mondino tras la canonización de Mama Antula, para la que fueron convocados. Quiénes son. Inquietud en la Iglesia

El domingo 11 de febrero, cuando se vea por primera vez cara a cara con el Papa Francisco en Roma, en el marco de la canonización de María Antonia Paz y Figueroa, conocida popularmente como Mama Antula, Javier Milei estará flanqueado, además de la comitiva presidencial, por una treintena de empresarios de primera línea.

La invitación, sin los gastos incluidos, corre por cuenta de la canciller Diana Mondino, a través de su secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Héctor Marcelo Cima, que este miércoles, mientras en el oficialismo se seguía con atención la maratónica sesión en torno a la denominada Ley Ómnibus, todavía esperaba confirmaciones de los convocados. Es que Mondino aprovechó el viaje a Roma y la audiencia del presidente con el Papa para robustecer la comitiva con parte del establishment que, en líneas generales, apoya la gestión del nuevo gobierno.

Entre los invitados, según el listado al que accedió este medio, figuran desde Jaime Campos -presidente de la Asociación Empresaria Argentina-, José Luis Acevedo -presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios-, Hugo Sigman -del Grupo INSUD-, Luis Ureta -vicepresidente Ejecutivo de Globant en Europa- y Daniel Funes de Rioja -presidente de la Unión Industrial Argentina-, hasta Alejandro y Marcos Bulgheroni -de Pan American Energy-, Alejandro Elsztain -de IRSA-, Cristiano Rattazzi -de la empresa Modena- y Marcos Pereda -vicepresidenta de la Sociedad Rural-.

También Alfredo González, de CAME; Giorgio Alliata di Montereale, presidente de la Cámara de Comercio Italiana en Argentina y titular de Eurocámara Argentina; Mauricio Canineo, de Pirelli Argentina; Santos Doncel Jones, presidente de IVECO Group; Adelmo Gabbi, presidente de la Bolsa de Comercio, Natalio Grinman, presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, y Carlos Ormachea, del Grupo Techint, entre otros.

Según el cronograma romano, además de la canonización de Mama Antula -la primera santa argentina-, que tendrá lugar en la mañana del domingo 11 del mes próximo en la Basílica de San Pedro, la canciller y los empresarios tendrán entre el martes y el miércoles siguientes una ronda de entrevistas en la capital italiana -según confiaron, en el marco de la Confederación General de la Industria Italiana-, participarán de la conferencia internacional Engaging the Global South: the role of women in addressing key challenges, y de la cena de honor, al final del viaje, ofrecida por el gobierno italiano.

Será, en ese sentido, no solo el primer cara a cara de Milei con el Papa Francisco –previsto para el lunes 12 a las 10 de la mañana hora local-, después de los durísimos cuestionamientos que el mandatario lanzó durante la campaña, si no la primera foto del presidente con un grupo de los empresarios más importantes del establishment local, a dos meses de que el jefe de Estado se hiciera cargo del gobierno.

Milei llegará a Roma desde Israel, después de visitar Tel-Aviv y Jerusalén y entrevistar con las autoridades de ese país: en ese caso, la comitiva presidencial, según confiaron, se prevé bien reducida. En Roma, el presidente se alojará solo en la residencia del embajador en aquel país.

La inclusión de los empresarios en la comitiva oficial, sin embargo, en una celebración como la santificación de Mama Antula, habría generado cierta inquietud en Roma y en la Iglesia católica. Tanto fuentes oficiales como algunos de los hombres de negocios invitados confirmaron que la agenda de actividades incluye la participación en la Basílica de San Pedro.

Francisco siempre impulsó en su discurso público una serie de interpelaciones al empresariado. En el 2022, por ejemplo, les pidió a representantes de la Confederación General de la Industria Italiana que “paguen los impuestos”: “Son el corazón del pacto social”, resaltó en ese momento. Durante la pandemia, también criticó el uso de aviones privados para salir de vacaciones. El año pasado, por caso, también les pidió a los hombres de negocios que huyan “del beneficio a toda costa”.

Lo cierto es que, más allá de la agenda empresaria en la capital italiana, Milei centrará su visita a Roma en su primer encuentro a solas con el Papa en el intento del gobierno de recomponer la relación con la Iglesia católica tras los fuertes cuestionamientos del presidente a Francisco durante la campaña que el propio pontífice resaltó haber dejado atrás después de los pedidos de disculpas públicos del jefe de Estado.

En medio de ese propósito, hasta ayer todavía no se había oficializado la designación de Francisco Sánchez como secretario de Culto, a pesar de que, según confiaron a este medio, el ex diputado ultraconservador presentó este martes los papeles para iniciar los trámites y ser nombrado formalmente a través del Boletín Oficial. Habían surgido ciertos reparos en Cancillería por el revuelo mediático originado por viejos tuits del ex legislador neuquino en los que ventiló su aversión con la figura del Papa. Cuando eso se hizo público nuevamente en estos días, se mostró públicamente arrepentido.

En el caso de la representación argentina ante la Santa Sede, todavía no había trascendido en estas horas el nombre del reemplazo de María Fernanda Silva, la embajadora designada por la anterior gestión que prevé regresar al país en los próximos días. Mondino aún no resolvió, al menos no trascendió su decisión, si ya se definió por un diplomático de carrera o un dirigente político. En este último caso, a la canciller se le liberó un cupo para cuando quiera aprobar los pliegos en el Senado con la salida de Daniel Scioli de la embajada de Brasil, y su mudanza a la Argentina para hacerse cargo de la Secretaría de Turismo y Deportes. Una jugada que motivó la renuncia de Ricardo Schlieper como subsecretario de Deportes de la Nación, un funcionario que llegó a ese lugar de la mano de Mauricio Macri.