«Es un momento para organizarnos en distintos frentes», sostuvo la ex jefa de Estado durante su discurso en la actividad a la que convocaron las organizaciones Llamamiento Argentino Judío y el observatorio El Ojo Moro.
«No podemos dejar que nos envuelvan, nos atrapen y nos encierren», señaló ante la atenta mirada de ex funcionarios y dirigentes kirchneristas.
En la actividad estuvieron presentes el ex canciller Héctor Timerman, el ex ministro de Defensa Agustín Rossi, los ex legisladores Daniel Filmus y Gabriela Cerruti, el periodista Horacio Verbitsky, Martín Sabatella, Víctor Santa María y los integrantes de Carta Abierta Ricardo Foster y Eduardo Jozami.
La ex presidente habló sobre su gobierno y la evaluación que hizo después de dejar la presidencia. «Creo haber ayudado a que muchísimos argentinos estén mejor. Aquellos que no podían jubilarse, estudiar, tener un trabajo, acceder a la educación, a la salud, a la igualdad y a la identidad de género», afirmó.
«No voy a misa ni me confieso los domingos, pero cuando Dios me llame, me voy a poder poner enfrente y contarle algunas de las cosas que hicimos para que nuestros compatriotas estén mejor», sostuvo la ex mandataria. En ese sentido, agregó: «Creo haber contribuido un cachito con lo que Dios nos impone a todos los cristianos».
Por otra parte, Cristina se refirió a la situación que atraviesa la líder de la Tupac Amaruc, Milagro Sala, que está detenida hace casi un año en la provincia de Jujuy. «En Argentina hay presos políticos», afirmó, y señaló que «su detención es una afrenta al prestigio del país en derechos humanos».
«No hay un solo argentino que pueda decir que esta presidenta, frente a cualquier actitud, aun la más repudiable, no hubiese tenido un gesto de reconocimiento de derechos humanos porque la mayoría opina diferente«, aseguró, en referencia a las declaraciones del presidente Macri, quien afirmó que «a la mayoría de los argentinos nos pareció que había una cantidad de delitos importante cometidos por Sala, y que ameritan las causas que tiene abiertas».
Por último, se refirió a su declaración en la causa AMIA y apuntó contra la Justicia por la falta de culpables después de dos décadas. «Pasaron más de 22 años y todavía no podemos conocer la verdad. Habla muy mal de nuestro sistema judicial y de las instituciones en Argentina», expresó.