18 de marzo, 2020

Cacerolazos piden la renuncia de Bolsonaro por su manejo del coronavirus

Tras cuatro muertes, los ciudadanos de diversos estados se manifestaron desde sus casas contra la falta de acción del mandatario brasileño respecto a le epidemia.

Cacerolazos para protestar y reclamar la renuncia del presidente Jair Bolsonaro se escucharon durante una hora en las principales ciudades de Brasil, en repudio a la conducción de la crisis sanitaria y económica surgida por la pandemia del coronavirus.

Las principales protestas ocurrieron en las ciudades de San Pablo, Río de Janeiro, Brasilia, Salvador, Fortaleza, Natal, Belo Horizonte Porto Alegre.

En San Pablo, el gobierno del estado homónimo informó en un comunicado que dos personas, de 65 y 80 años, murieron en el Hospital Santa Maggiore, de la prepaga Prevent Senior, destinada a la tercera edad, el mismo lugar donde falleció el portero de 62 años el día 16, el primer deceso por Covid-19 en Brasil.

Pasada la media tarde, las autoridades confirmaron que un cuarto enfermo, un hombre de 83 años murió por coronavirus en Jundiaí, a 60 kilómetros de la capital paulista.

Las manifestaciones ocurrieron durante la cuarentena autoimpuesta por los vecinos ante la falta de comando del gobierno federal al respecto hasta el día de hoy, cuando se instaló un comité de crisis y fueron anunciadas medidas económicas.

Los cacerolazos comenzaron cuando Bolsonaro hablaba por televisión enviando al Congreso un pedido para establecer el estado de calamidad, que permite al gobierno ampliar el gasto público y el déficit fiscal.

Luego de las protestas que duraron más de una hora, llegó la voz de los bolsonaristas convocados por el propio presidente a hacer un cacerolazo a partir de las 21, aunque con duración menor bajo el lema «Fuera Izquierda».