Familiares de los submarinistas alojados en la base naval de Mar del Plata recibieron con dolor y furia la confirmación de que hubo una explosión el miércoles pasado registrada en la zona donde se reportó por última vez el submarino ARA San Juan .
Pocos minutos antes de la conferencia del capitán Enrique Balbi en Buenos Aires, los familiares habían sido informados de la noticia y algunos de ellos se retiraron de la base entre lágrimas e insultos a las autoridades.
«¡Los mataron, mataron a mi hijo!», gritó el padre de unos de los submarinistas que, junto con su hijo, salió a toda velocidad en un auto de la base naval.
«Se roban la plata los jefes, por eso. Son unos hijos de mil puta (sic), mataron a mi hermano porque los sacan con alambre a navegar, yo estuve en la Armada», dijo el hermano de uno de los navegantes que viajaba en el mismo auto.
En otro de los vehículos que salieron de la base viajaba una mujer que repitió: «Nos mintieron, nos mintieron».
A su vez, una ambulancia se retiró de la base con la sirena encendida y otra unidad de emergencias llegó a la base minutos más tarde.
Por su parte, la esposa de Germán Suarez, sonarista del submarino ARA San Juan, afirmó que los familiares de los tripulantes desaparecidos «están furiosos» por la confirmación de la explosión brindada oficialmente y responsabilizó del hecho a «los 15 años de abandono de la Armada».
María Itatí Leguizamón, explicó que los familiares recibieron la información oficial en la base naval de Mar del Plata minutos antes de la conferencia de Balbiy detalló que no dejaron terminar de leer el comunicado ya que «la gente se puso muy agresiva».
«Están furiosos. Empezaron a romper todo. No les dejaron de terminar de leer el comunicado», afirmó la esposa del tripulante.