8 de junio, 2017

Marcha y furia: los vecinos incendiaron la casa del acusado por el crimen de Agustin

En medio de una movilización para pedir justicia se produjeron incidentes. Además, el padre dela víctima reconoció al asesino.

 

Tras el brutal crimen de un chico de tres años, asesinado de un balazo por la espalda por dos ladrones que le robaron a su papá en Lomas de Zamora, manifestantes incendiaron la casa del acusado de ser el autor de los disparos homicidas.

 

Familiares, allegados y vecinos se congregaron a horas de lo ocurrido con carteles que reclamaban «justicia» por Agustín, el nene asesinado, y «más policía» en el barrio. Denunciaron robos y cuestionaron al municipio y a las fuerzas de seguridad, al tiempo que sostuvieron que Villa Centenario «es un barrio liberado».

 

 

La manifestación se llevaba a cabo en la Plaza 17 de Agosto, a sólo dos cuadras del lugar por donde Martín Bustamante y su hijo Paulo Agustín de 3 años, caminaban cuando fueron abordados por dos adolescentes el miércoles por la noche que terminaron matando al menor.

 

El clima de tensión fue creciendo entre quienes se habían convocado en el lugar, lo que quedó reflejado en los testimonios que dieron a los canales de noticias apostados en el lugar. De las palabras no tardaron mucho en pasar a los hechos y se trasladaron hasta la casa del adolescente acusado del hecho, en la que comenzaron a causar destrozos.

 

Bustamante contó que había salido a comprar una pizza y en la esquina de las calles Timoteo Gordillo y Victorino de La Plaza, a una cuadra de Camino Negro y a tres de los Tribunales de Lomas de Zamora, los interceptaron los ladrones que «estaban escondidos» detrás de un árbol.

Los asaltantes le robaron la plata y cuando se iban uno de ellos disparó y un balazo impactó en la espalda del nene, quien murió poco más tarde en la Clínica Boedo.

«El que tenía el arma se sonrió», contó Bustamante, de 28 años, quien dijo que en ese momento él llevaba «de la mano» a su hijo.