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15 de abril, 2018

Estados Unidos extenderá presencia en Siria tras el bombardeo

El gobierno norteamericano anunció sanciones contra Rusia para arrinconar al régimen de Bachar El Asad por el uso de armas químicas

Apenas un día después de los tan anunciados ataques de Estados Unidos, Francia y Reino Unido contra el Ejército sirio, el gobierno de Donald Trump anunció hoy nuevas e inminentes sanciones contra el mayor aliado de Damasco, Rusia, y, según contó el presidente francés, Emmanuel Macron, tomó la decisión de quedarse «a largo plazo en Siria».

 

En las últimas semanas, Trump había coqueteado públicamente con la idea de retirar todas las tropas y aviones de Siria, pero había encontrado resistencia en el Pentágono, desde donde aclararon que empezar a analizar y planear una salida del país árabe, pero nada inmediato.

 

 

El domingo, el presidente francés anunció en una extensa entrevista con el canal local BFMTV que había convencido a Trump de «quedarse en Siria a largo plazo».

 

 

Acto seguido, Macron defendió los ataques contra las bases militares sirias del sábado a la madrugada como una represalia al presunto uso de armas químicas denunciado por la oposición de ese país árabe y aseguró que no fue una declaración de guerra, sino «una intervención multilateral» puntual.

 

«Tuvimos éxito: todos los misiles lanzados alcanzaron sus objetivos, las capacidades químicas del régimen sirio han sido destruidas y no hubo ninguna víctima colateral», destacó el mandatario.

 

 

Ni la Casa Blanca ni el Pentágono anunciaron un cambio de estrategia en Siria, pero la embajadora estadounidense para la ONU, Nikki Haley, sí adelantó hoy que su gobierno «no se irá (de Siria) hasta que hayan conseguido sus objetivos».

Hasta ahora, el objetivo declarado de la Casa Blanca en Siria era combatir y destruir a la milicia Estado Islámico (EI), nada más.

 

 

Además, Haley informó que el gobierno no se limitará a sancionar al gobierno de Bashar al Assad por el presunto ataque químico denunciado por la oposición siria, sino que también profundizarán su enfrentamiento con Rusia.

 

 

«Verán que pronto vendrán sanciones contra Rusia», anunció la embajadora en un programa de la cadena de noticias CBS y adelantó que podrían oficializarse mañana lunes.

 

 

«Irán directamente a cualquier tipo de empresas que traten con equipos vinculados a Al Assad y a las armas químicas que usa. Creo que todos las van a sentir ahora. Creo que todos saben que envíamos un mensaje fuerte y nuestra esperanza es que lo escuchen», agregó Haley.

 

 

Desde el anterior gobierno de Barack Obama, Estados Unidos impone sanciones financieras, comerciales y políticas contra gran parte del gobierno ruso, de las empresas y bancos estatales y de aquellos vinculados a personas del círculo íntimo del presidente Vladimir Putin.

 

 

Por su parte, la vocera de la Cancillería rusa, Maria Zakharova, acusó a Estados Unidos de estar sancionando a su gobierno sólo por actuar como «un actor global» y afirmó que la política de la Casa Blanca hacia el Kremlin «no tiene ninguna relación con la realidad», según la agencia de noticias estatal Tass.

 

El sábado a la madrugada Estados Unidos, Francia y Reino Unido lanzaron ataques coordinados contra tres objetivos en el oeste del país: el primero, un centro de investigación, desarrollo, producción de armas químicas y biológicas; el segundo, un almacén de armas químicas al oeste de la ciudad de Homs; y el tercero, otro almacén de armas químicas y un puesto de mando militar en la misma zona.

 

 

El canciller británico Boris Johnson alertó sobre el peligro de la «represalia rusa» tras los bombardeos de Estados Unidos, Francia y el Reino Unido sobre Siria, defendiendo su legitimidad a capa y espada, pero en Londres es hora de críticas al gobierno conservador y la premier Theresa May.

 

Este lunes, May enfrentará la Cámara de los Comunes, donde los laboristas -y no solo ellos- quieren saber por qué no hubo una consulta parlamentaria antes de dar la orden de fuego «a la rastra de los tuits de Donald Trump».